No va más para Alonso y Sainz: la F1 más esperada arranca en Barcelona

Se acabó la espera. 66 días después de que los motores de la Fórmula 1 fueran desmontados en el inolvidable Gran Premio de Abu Dabi, la competición más glamurosa del automovilismo mundial se despereza en el Circuito de Cataluña. Allí arrancará este miércoles la pretemporada más esperada en mucho tiempo, después de un invierno de intenso trabajo para las diez escuderías enroladas en la F1. Todas se han empapado del nuevo reglamento buscando la pepita de oro que les permita progresar en la parrilla. Todas miran con más esperanza que nunca al nuevo año.

Entre las variadas consecuencias que provocó la pandemia en la Fórmula 1, una de ellas fue el aplazamiento del esperado cambio de normativa. La revolución tenía que haberse producido en 2021, pero se retrasó un año. A la postre, este cambio le sentó estupendamente a la competición, que vivió un año histórico coronado con el memorable adelantamiento del campeón Max Verstappen a Lewis Hamilton en la última vuelta de la última carrera.

La rabieta de Mercedes y sobre todo de Hamilton, que llego a plantearse su retirada de la Fórmula 1, derivó semanas más tarde en el guillotinazo al director de carrera de la F1, Michael Masi, un sacrificio con el que la FIA espera haber aplacado al heptacampeón mundial. La búsqueda del octavo título, cima que no conquistó nadie, ni siquiera Michael Schumacher, es un gancho demasiado poderoso ahora que el interés por la competición ha renacido en todo el planeta.

Todas las nuevas normas (recuperación del efecto suelo, neumáticos más anchos, reducción del tope presupuestario) están diseñadas para aumentar la igualdad en pista y en Barcelona se empezará a ver si esta apuesta integral da sus frutos. Partido a partido: lo más importante para todos los equipos en esta primera fase de la pretemporada es asegurarse de que sus coches no sufren averías, completan muchos kilómetros y recolectan miríadas de datos. Ya habrá tiempo de hilar más fino en Baréin (10-12 marzo).

Alonso y Sainz cruzan los dedos

De los 20 pilotos enrolados en uno de los Mundiales más ilusionantes de la historia, dos vuelven a ser españoles. Los dos tienen ya experiencia de sobra y militan en equipos que vienen de un 2021 esperanzador, por lo que rezuman optimismo ante el nuevo proyecto. Fernando Alonso y Carlos Sainz tienen licencia para soñar.

El asturiano ya es el más veterano de la parrilla tras la marcha de Kimi Raikkonen. Volvió a la Fórmula 1 precisamente por el cambio de normativa: ese fue el detonante que le invitó a soñar, por qué no, con la posibilidad de un tercer título mundial. De momento, el año pasado volvió a subirse a un podio. Su vasto conocimiento después de dos décadas en el Mundial es fundamental para sacarle punta a una pretemporada tan importante.

En cuanto al madrileño, también tenía en mente la nueva reglamentación cuando decidió abandonar McLaren rumbo a una titubeante Ferrari. Sabía que la Scuderia tenía más opciones que nadie de dar con la tecla y ha llegado el momento de comprobar si su apuesta era ganadora. El equipo más laureado de la F1 lleva demasiado tiempo lejos de su lugar natural y se ha volcado este invierno en Maranello para recuperarlo. La afición española cruza los dedos por sus dos balas.